Los buñuelos son una especialidad gastronómica de los países Europeos que rodean al mediterráneo.
Se trata de bolas de masa de harina, fritas en abundante aceite, y con muchos rellenos.
La variante más popular de esta receta en países como España y Portugal, son el 'buñuelo de bacalao'.
Existe su versión dulce Española, los 'buñuelos de viento', que son tradicionales en época de cuaresma, de comer tal cuál o con algún relleno de chocolate o crema, entre los más vendidos.
Los buñuelos de lechuga, son una versión distinta de comer verdura, ideal en dietas vegetarianas.
Son una receta muy sencilla de realizar y rápida, con una textura crujiente por fuera y esponjosa por dentro.
Ideal para acompañar con una salsa de crema fresca, crema agria o una mayonesa casera.
Ingredientes
Como preparar Buñuelos de Lechuga
Lo primero, vamos a preparar los cogollos de lechuga, para ello cortamos el tronco y lavamos muy bien, escurrimos y reservamos.
Añadimos en un recipiente el huevo, el diente de ajo, sal, pimienta, perejil y la lechuga reservada, y batimos con ayuda de unas varillas eléctricas, hasta que integren todo. Añadimos la harina y la levadura (previamente tamizadas) y seguimos batiendo durante unos minutos más, hasta formar una masa espesa (si te queda muy ligera, puedes añadir 1/2 cuchara más de harina para espesar).
Cogemos una sartén con abundante aceite y llevamos a fuego alto.
Con ayuda de dos cucharas, cogemos un trozo de la masa resultante y realizamos como una bola, que luego podemos aplastar un poco, y añadimos a la sartén con el aceite ya caliente, dejamos dorar por ambas caras y sacamos a un plato con papel absorbente, para quitar el exceso de aceite. Repetimos este punto con toda la masa.
Ya estarán listas para comer, puedes servir en una fuente sobre unas hojas de lechuga o cebollino, ideal con una salsa agria o mayonesa.
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Ingredientes
Instrucciones
Lo primero, vamos a preparar los cogollos de lechuga, para ello cortamos el tronco y lavamos muy bien, escurrimos y reservamos.
Añadimos en un recipiente el huevo, el diente de ajo, sal, pimienta, perejil y la lechuga reservada, y batimos con ayuda de unas varillas eléctricas, hasta que integren todo. Añadimos la harina y la levadura (previamente tamizadas) y seguimos batiendo durante unos minutos más, hasta formar una masa espesa (si te queda muy ligera, puedes añadir 1/2 cuchara más de harina para espesar).
Cogemos una sartén con abundante aceite y llevamos a fuego alto.
Con ayuda de dos cucharas, cogemos un trozo de la masa resultante y realizamos como una bola, que luego podemos aplastar un poco, y añadimos a la sartén con el aceite ya caliente, dejamos dorar por ambas caras y sacamos a un plato con papel absorbente, para quitar el exceso de aceite. Repetimos este punto con toda la masa.
Ya estarán listas para comer, puedes servir en una fuente sobre unas hojas de lechuga o cebollino, ideal con una salsa agria o mayonesa.