Lo primero, es pelar los plátanos y cortar.
Cogemos una sartén con aceite y llevamos a fuego medio - alto.
Cuando caliente el aceite, añadimos los trozos y doramos por ambos lados.
Sacamos a una fuente con papel absorbente de cocina, para quitar el exceso de aceite.
Aplastamos los plátanos, con ayuda de un tenedor (lo podemos dejar más enteros).
Añadimos sal al gusto, al plátano.
Volvemos a freír hasta que doren.
Sacamos de nuevo, sobre papel absorbente de cocina y listos para comer.
Raciones 2