Primero, sobre la superficie que vamos a trabajar ponemos la loncha de jamón york y añadimos encima dos de queso (del que más os guste o de fundir) y añadimos encima otra loncha de jamón york.
Preparamos un bol con la harina, otro bol con los huevos batidos y otro bol con el pan rallado, y en una sartén ponemos abundante aceite y llevamos a fuego alto.
Pasamos nuestros cuadrados de jamón y queso por cada bol, en el orden que indiqué arriba, por todos los lados, incluyendo los bordes.
Vamos añadiendo a la sartén, freímos 1 minuto por cada lado, retiramos y sacamos a una bandeja con papel absorbente de cocina, para quitar el exceso de aceite.
Servir caliente, para que al cortar el queso esté fundido y el exterior crujiente.
Raciones 2