Primero vamos a lavar y trocear las fresas.
Reservamos en el congelador durante 2 h.
Transcurrido el tiempo las añadimos en un recipiente y trituramos.
Añadimos el yogurt y el azúcar y mezclamos todo bien.
Lo pasamos a un recipiente y metemos en el congelador 20 minutos, para que vuelvan a congelar pero no demasiado, que sea una masa manejable (si lo dejas mucho tiempo en el congelador o de un día para otro, es posible que se te endurezca mucho y no quede cremoso para luego trabajar y consumir).
¡Ya tienes tu helado de fresas!.
Para consumir, sacar 10 minutos antes del congelador.
Raciones 4