Primero pelamos los aguacates, retiramos el hueso central.
Ponemos los aguacates con el resto de los ingredientes, excepto el tomate, en una trituradora o licuadora y mezclamos todo muy bien.
Ponemos la mezcla a un bol y añadimos el tomate, sin el agua que expulsar (para que no nos quede tan aguado) y mezclamos con ayuda de una cuchara o espátula.
Probamos por si tenemos que rectificar de sal o pimienta y ya estaría listo nuestro guacamole.
Podemos servir el guacamole dentro de los aguacates, y si tenéis invitados y lo preferís, podéis no salpimentar para que cada comensal lo realice a su gusto.
Raciones 2