Lo primero, es lavar muy bien las fresas bajo el grifo del agua y reservamos en un plato con papel absorbente, para que sequen bien.
En una cubitera (de las del congelador de hacer hielo), colocamos cada fresa en un agujero (con lo verde de las fresas hacía arriba).
En un bol añadimos las tabletas de chocolate (las que prefieras chocolate negro, con leche o blanco) en onzas y llevamos al microondas para fundirlo, hacerlo en tiempos cortos.
Añadimos el chocolate fundido por encima de las fresas, dejamos que templen, y metemos en el frigorífico durante mínimo 30 minutos para que solidifique bien. Y listas para comer!.
Raciones 2