Lo primero es lavar bien los tomates y cortamos en finas rodajas.
Cortamos en finas rodajas la mozzarella.
En un plato o fuente añadimos un trozo de tomate, uno de mozzarella, y así repetidamente con todos.
Añadimos por encima la albahaca, sal y pimienta al gusto, y un chorro de aceite de oliva y listo para comer.
Raciones 2